María González Rodríguez de Biedma

María tuvo el privilegio de poder explorar nuevas culturas desde muy pequeña. Esos viajes familiares alrededor del mundo la empujaron a estudiar en IE University.  De la universidad la atrajeron las oportunidades de intercambio y prácticas en el extranjero, así como el reconocido ambiente multicultural del campus.

Ahora, en el cuarto año de su Grado en Estudios de Arquitectura, María reflexiona acerca de todo el esfuerzo invertido en este tiempo. Durante estos años, se ha dado cuenta de que la arquitectura ha cambiado su forma de pensar: ahora observa y piensa de manera diferente, y presta más atención a los detalles y al contexto general que rodea a su trabajo. La arquitectura también ha avivado su curiosidad. Al ser un grado multidisciplinar, el programa le ha revelado conceptos de otras áreas del conocimiento, desde comprender cómo funciona la energía geotérmica a descubrir las especies endémicas del Estrecho de Ormuz.

A María la satisface descubrir nuevas perspectivas del mundo. El Grado en Estudios de Arquitectura, dice, te transforma en un arquitecto y diseñador, lo que no sería posible sin la ayuda del personal y el cuerpo docente de IE University. El cerrado grupo de 30 estudiantes del programa se ha convertido en su pequeña familia, cuya evolución recibe una atención especial de los profesores.

Estudiar en el campus de Segovia ha sido una parte esencial de la experiencia universitaria de María y su paso por él la ha llenado de gratos recuerdos. Como Segovia es una ciudad tan pequeña, parece un microcampus en el que siempre te encuentras con alguien conocido. Una de las ventajas de que todo esté a poca distancia.

Segovia posee “una magia que hace que las cosas sucedan”, dice. El paisaje es tan bello que algunos recuerdos son aún más bonitos por el lugar en el que ocurrieron. Entre sus recuerdos favoritos están los atardeceres en las montañas junto a sus amigas, tomando cervezas en las plazas de la ciudad o las escapadas a La Granja. Después de vivir juntas y de haber compartido tantos momentos especiales, sus amigas de arquitectura se han convertido en sus hermanas. María también disfruta con el espíritu internacional de la universidad, que acoge a estudiantes de Marruecos, Argentina, Colombia, Alemania y demás países. Uno de los aspectos más reseñables de su experiencia ha sido conocer a gente tan similar a ella pese a proceder de lugares tan diferentes. A sus amigas también les encanta viajar, por lo que aprovechan cualquier excusa que encuentran para visitar las ciudades de origen de cada una.

María y sus compañeras también se han unido para formar su propia empresa de diseño, The Thing Studio. Por el momento solo diseñan pendientes, aunque planean expandir el negocio en el futuro. Este proyecto personal ha sido clave para el desarrollo profesional de María, quien agradece a IE University haberles proporcionado las herramientas necesarias para llevarlo a cabo. Por ejemplo, el estudio de diseño crea los pendientes con la maquinaria que la universidad utiliza para generar los modelos de arquitectura.

En su tiempo libre, María también lidera el Arts Club, que organiza clases de arte en un estudio de la Casa de la Moneda. Cuando se unió al club hace dos años, este estaba bastante inactivo. Pero, desde entonces, y junto con una amiga con la que comparte su pasión por la pintura, ella ha conseguido que llegue a más gente compartiendo los eventos que organiza en las redes sociales. Liderar este club ha contribuido a canalizar su energía creativa y le ha servido como válvula de escape a su actividad formativa, lo que también la ha ayudado en sus estudios. Uno de los aspectos más destacables han sido sus sesiones con el artista profesional Alberto Fernández Hurtado, quien no solo mostró al grupo sus habilidades artísticas, sino que también les enseñó lecciones vitales como tener una mentalidad abierta, la forma de sobrellevar el fracaso y la importancia del respeto por lo diferente.

Otro de los factores más relevantes del paso de María por IE University ha sido su intercambio en Ciudad de México. Esta aventura supuso una revelación, ya que aprendió de una cultura rica cuyos vibrantes colores han empapado su estilo arquitectónico. María también ha tenido la oportunidad de enriquecer su desarrollo profesional mediante prácticas profesionales en estudios de reconocido prestigio durante su tercer y cuarto año. Actualmente trabaja para Miguel Judas en Lisboa, después de completar unas prácticas en Miralles Tagliabue EMBT el verano anterior. Gracias a estas experiencias, ha descubierto su interés por una arquitectura más pequeña y residencial, y está entusiasmada con la idea de abrir su propio estudio. Por el momento, María está centrada en completar sus estudios de forma satisfactoria y en disfrutar con sus creaciones para que estas allanen su futuro profesional.