Red Muluk | IE School Architecture and Design

Red Muluk

Nuestro mundo se enfrenta, actualmente, a una profunda crisis global: la escasez de agua dulce. Existen entornos áridos y húmedos en todo el mundo que requieren medidas gubernamentales. Para captar la atención pública sobre esta crisis, la Organización de las Naciones Unidas nombró el periodo comprendido entre los años 2005 y 2015 como el Decenio Internacional para la Acción “El agua, fuente de vida”. Además, la Unesco declaró 2013 como el Año Internacional de la Cooperación en la Esfera del Agua. Desafortunadamente, pese a estas iniciativas y esfuerzos internacionales, no se han hecho grandes esfuerzos para abordar el problema.

Y debido a la falta de acción, los problemas de escasez de agua han aumentado. Sin embargo, basándose en la vida humana y en lo que hemos hecho en las últimas décadas, los científicos han descubierto un recurso inesperado: la niebla (Klemm et al., 2012).

La niebla cuenta con gotas de agua en su interior, y ha demostrado ser una fuente revolucionaria para “crear” y reutilizar agua. Se ha convertido en un recurso hidrológico fundamental para proporcionar agua potable a los seres humanos, así como en una fuente de agua para entornos naturales como los bosques (Domen et al., 2014).

El uso de la niebla no ha sido muy bien recibido por parte de los organismos gubernamentales por una cuestión de derechos humanos. Principalmente, porque recolectar niebla implica ocupar espacios públicos y es un concepto de diseño que puede ser incompatible con la naturaleza humana.

El objetivo de este proyecto es identificar las desventajas de los colectores de niebla. Con el foco puesto en la sequía y el problema de escasez de agua en Oaxaca, México, la creación resultante fue un conjunto de estructuras e instalaciones que permiten recolectar niebla sin invadir el espacio personal humano. Es un diseño respetuoso con los entornos circundantes y las comunidades locales.

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