Manuela Concha
Soy de Colombia, pero me mudé a España en 2021 para perseguir mis sueños. O, mejor dicho, para labrarme el futuro que quería mediante mis estudios. Siempre me ha encantado conocer a gente de todas partes del mundo y poder observar las diferencias entre culturas. Por eso, aunque cruzar el charco y mudarme tan lejos de mi familia era una decisión difícil, sabía que IE University era un lugar que me permitiría crecer no solo a nivel académico y profesional, sino también como persona.
"Aunque hace poco que empecé la carrera, ya he tenido la oportunidad de participar en varias actividades que han impulsado mi crecimiento personal y profesional."
La grandeza nace de las cosas pequeñas
Por difícil que fuera la decisión de mudarse al otro lado del Atlántico, la estructura del doble grado que Manuela eligió era exactamente lo que buscaba. El contenido del programa, unido a “la increíble diversidad cultural” de la comunidad de IE, le bastó para decidirse.
Desde que tomó esta decisión, Manuela se ha encargado de aprovechar la experiencia al 100 %. El doble grado le permitirá estudiar primero en Segovia y luego en Madrid, y participar en multitud de actividades extracurriculares. De momento, Segovia le ha aportado muchas cosas: ha entablado amistad con tantos compañeros de distintos programas que siempre encuentra caras conocidas cuando se mueve por el campus o por la ciudad.
El doble grado que está estudiando es “difícil y exigente”, pero le gusta tener objetivos que ir logrando día a día y asegura que las situaciones complejas a las que se tiene que enfrentar le sirven para mejorar su capacidad de resolución de problemas. En conjunto, el programa engloba sus principales pasiones: la informática, las matemáticas, la economía y los negocios. Aprende colaborativamente con sus compañeros y, dado que en el campus de Segovia este programa solo tiene un grupo, han creado una relación muy cercana.
Al margen de las clases, y pese a que no ha tenido tiempo de apuntarse a ningún club deportivo, le gusta ir al gimnasio. Además, como Segovia no es muy grande, a menudo se topa con otros estudiantes en las clases de yoga y spinning. Tener la mayoría de las clases por la tarde le permite aprovechar las mañanas para dedicarse a disciplinas artísticas como el canto, la pintura o el ballet, mientras que por las noches estudia y va al gimnasio.
Por otro lado, valora mucho la amplia variedad de clubes, organizaciones, laboratorios, seminarios y oportunidades de voluntariado que hay en el campus. “Aunque hace poco que empecé la carrera, ya he tenido la oportunidad de participar en varias actividades que han impulsado mi crecimiento personal y profesional”.
Ejemplo de ello es el Start-up Lab, que le ha permitido entender mejor cómo funciona el mundo empresarial. Por ejemplo, ahora que sabe que tendrá que presentar sus propuestas ante inversores potenciales para encontrar financiación, se está esforzando por potenciar su creatividad, sus dotes de liderazgo y su capacidad de organización. Tenía una idea para un producto que, con tiempo y esfuerzo, se ha transformado en un proyecto sólido, y este proceso le ha servido para confirmar que escogió la universidad adecuada para lograr sus metas.
Ahora mismo, Manuela piensa en su futuro y aún no tiene un plan concreto, pero pretende aprovechar todo lo que pueda las oportunidades de ampliar conocimientos y adquirir experiencia que le proporciona IE University. Por ahora, prefiere vivir día a día e intentar ser la mejor versión de sí misma sin obsesionarse por lograr grandes cosas todavía.
Para hacerlo, necesita tiempo y experiencia, y ella siempre se ha guiado por la divisa Sic parvis magna (la grandeza nace de las cosas pequeñas). Manuela no le resta importancia a los pequeños logros, porque sabe que, con paciencia y perseverancia, estos se traducirán en cosas grandes. Estamos convencidos de que, con el tiempo, demostrará que es cierto.
