El objetivo del proyecto era crear un país ficticio y desarrollar su identidad de marca. Los alumnos crearon Seiña, situado entre las islas Galápagos y Costa Rica.
"Seiña es un lugar donde la gente tiene claras sus prioridades y se mantiene fiel a las mismas. Se trata de una mentalidad muy característica que encarna un mantra energético y antimaterialista. Los habitantes de Seiña celebran la vida, situando la familia y las relaciones personales en el núcleo de todas sus actividades. La vida es para disfrutarla. Seiña no es un destino: es una forma de vida”.