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Arextech gana la tercera edición del Global Legal Tech Venture Day de IE Law School

Arextech, una start-up de transacciones inmobiliarias reduce el tiempo que se necesita para cerrar una operación y aumenta la capacidad de negociación a través de su plataforma colaborativa sympl.deal.

Arextech gana la tercera edición del Global Legal Tech Venture Day, organizado por la IE Law School de IE University. El evento virtual, desarrollado en colaboración con la Law Schools Global League y con el patrocinio de LexisNexis, ha conectado a emprendedores y expertos de todo el mundo.

Este año, el primer premio ha recaído en Arextech, una start-up de transacciones inmobiliarias  que reduce el tiempo que se necesita para cerrar una operación y aumenta la capacidad de negociación a través de su plataforma colaborativa sympl.deal.

Arextech proporciona todas las herramientas imprescindibles a cada una de las partes implicadas en un acuerdo o negociación, lo que simplifica el proceso. Su plataforma colaborativa de gestión de proyectos, denominada sympl.deal, agiliza un proceso a menudo tedioso, difícil y lento, que consiste en organizar, presentar y revisar los documentos legales en un único punto. Esta solución técnica se complementa con ayuda personalizada por parte de Arextech para atender las necesidades cotidianas de sus clientes.

Ignacio Suarez, director de operaciones y socio de Arextech, pretende que la start-up se convierta en un hub global en la nube para facilitar las operaciones institucionales de forma ágil entre inversores, abogados e intermediarios. Actualmente, Arextech centra su actividad en las transacciones inmobiliarias en Canadá, Reino Unido, Alemania y España. Sin embargo, ya están en marcha sus primeros pilotos con bufetes de abogados, ya que buscan expandirse a todo el sector legal y al mercado internacional.

"La relación con el cliente es muy importante y es ahí donde intentamos centrar nuestros esfuerzos a la hora de desarrollar el producto. Queremos hacer más transparente la relación entre un abogado y sus clientes, y así intentar mejorar este sector", afirma Ignacio Suárez.

Arextech contará con una mentoría del vicepresidente de estrategia y M&A de CEMEA durante 6 meses y podrá reunirse con una selección de clientes para presentar su producto o servicio. Todos los finalistas tendrán acceso a una beca para uno de los programas de Executive Education de IE Law School. El ganador también tendrá la oportunidad de presentarse en el escenario de IE en el marco del South Summit para conseguir un pase directo al evento y acceder a un programa de aceleración con los propios mentores y expertos de IE para prepararse para el South Summit y así avanzar en múltiples áreas de su negocio.

Entre las empresas emergentes preseleccionadas se encontraban App4Legal, una plataforma vertical SaaS y marketplace de tecnología legal para equipos jurídicos con sede en más de 50 países; Docutable, que agiliza la tramitación de todo tipo de documentos para sus clientes en EE.UU., Reino Unido, Rusia y Armenia; Inhubber, un programa basado en blockchain que utiliza inteligencia artificial para aportar confianza y transparencia a los acuerdos comerciales y My Legal Einstein, una start-up con sede en Estados Unidos que aborda los problemas que existen en los procesos de colaboración en los contratos legales. Su solución, basada en la inteligencia artificial, reduce el tiempo de ejecución de los contratos en hasta un 80 %.

Las cinco start-ups que compitieron en el evento fueron evaluadas por un jurado compuesto por expertos locales e internacionales, integrado por Karel Escobar Sánchez, cofundador de Backfund, Gloria Sánchez Soriano, Group VP y directora de transformación de la asesoría jurídica del Banco Santander, Sumi Trombley, consultora senior de Uplevel Ops, y Daniel Lewis, vicepresidente y director general de Practical Guidance & Analytical en LexisNexis y cofundador de Ravel Law y Sébastien Bardou.

El estado de la industria de la tecnología jurídica

Mientras el jurado deliberaba, Alejandro Touriño, socio director y responsable de tecnologías de la información de Écija, moderó un debate con sus compañeros de mesa sobre el estado de la industria de la tecnología jurídica, las condiciones necesarias para su éxito y las tendencias futuras. La mesa contó con la participación de Alisha Anders, cofundadora de This is Legal Design y presidenta de la Asociación Alemana de Tecnología Jurídica, Elizabeth Lugones, consultora senior de Uplevel Ops, y Susan Mortimore, CEO de LexisNexis Austria.

Los participantes destacaron la trayectoria positiva de los proveedores de herramientas de tecnología jurídica junto con instituciones educativas como IE Law School a la hora de proporcionar un conjunto holístico de habilidades y conocimientos para navegar mejor por el presente y liderar el futuro del sector legal. De hecho, Susan Mortimore lanzó una advertencia a las nuevas empresas de tecnología jurídica, afirmando que llegar al mercado en el momento equivocado puede hacer que las ideas y los productos novedosos no encuentren comprador, como ella misma comprobó a diario con LexisNexis. Cada uno de los miembros de la mesa llamó la atención sobre las dudas que tienen muchos abogados con respecto a las soluciones tecnológicas, y pronosticaron que pasarán de dos a cinco años antes de que el sector legal esté preparado para la integración de la tecnología.

Elizabeth Lugones considera que son cada vez más las empresas que demandan este tipo de soluciones debido a la necesidad de centrarse en los datos, ser transparentes y de mejorar la gestión de los flujos de trabajo. Aunque el valor potencial de las soluciones tecnológicas es ilimitado, tanto Alisha como Elizabeth afirmaron que la tecnología es lo último, no lo primero, ya que es importante identificar el problema de fondo antes de poder encontrar una solución tecnológica. Al hacerlo, la tecnología puede aprovecharse al máximo y pasa de ser una herramienta complementaria a una imprescindible.

La inevitable disrupción y evolución de las prácticas jurídicas

En su discurso de apertura, Martin Hogg afirmó que "probablemente no hay nada más importante ahora mismo en el mundo jurídico que estudiar la forma en que la tecnología jurídica puede mejorar el negocio de los abogados [y] ayudar a los clientes a implicarse en sus propios intereses". Esto no sólo se cumplió, sino que se superó en cada una de las excelentes presentaciones de las start-ups que demostraron los beneficios actuales y el futuro potencial de hacer sencillo lo complejo mediante la utilización de soluciones tecnológicas.

Como afirmó Richard Maybey y corroboraron las presentaciones, los emprendedores del sector de la tecnología jurídica tienen las claves para liderar un cambio global en el mundo profesional del derecho.